El aprendizaje activo es una metodología centrada en el estudiante, donde se promueve su participación directa en el proceso educativo a través de actividades como discusiones, resolución de problemas, estudios de caso y proyectos colaborativos. En lugar de limitarse a escuchar al docente, el estudiante analiza, aplica y construye conocimientos, desarrollando así un rol más autónomo y comprometido con su formación.
Este enfoque es fundamental porque favorece una comprensión más profunda de los contenidos, mejora la retención del conocimiento y fortalece habilidades clave como el pensamiento crítico, la comunicación y el trabajo en equipo. Además, prepara al estudiante para enfrentar… >>>