Aprendi que las clases sincrónicas son en vivo, todos deben conectarse al mismo tiempo y participar en tiempo real, como si estuvieran en un salón de clases virtual. En cambio, las clases asincrónicas no tienen horario fijo. Cada estudiante puede entrar y hacer sus actividades cuando le convenga, lo cual es útil para quienes tienen trabajo, familia u otras responsabilidades. Este tipo de curso es ideal para personas que son organizadas, responsables y pueden trabajar solas sin necesidad de que el profesor esté presente todo el tiempo. También es importante que tengan buena motivación, ya que nadie estará recordándoles constantemente qué hacer. Por eso, se recomienda que los estudiantes se evalúen a sí mismos para saber si este tipo de curso es adecuado para ellos. La clave está en conocerse y saber cómo aprenden mejor.